No se puede vivir durmiendo tres horas por día. Si la cosa es laburar de noche, que el día sea mi siesta. Ah, otra cosa. Por qué la gente que peor te cae es la que más cerca se te sienta en ámbitos facultativos? Esa rara cualidad abrojística parece ser inherente a ellos, así como su capacidad para transformar mi cara en un amargo rictus de fastidio barely contenido.

A mí sola me pasa, tildarme enfrente del monitor con la mirada perdida y alto peligro de babeo sobre el teclado? La computadora es una droga muy eficaz.

Después de un año de viajar en el Urquiza, ayer descubrí que cuando la bocina toca una vez, te bajás de la izquierda, y cuando toca dos veces, de la derecha. UN AÑO. Me maravilla darme cuenta que aprendí a usar la tijera en el jardín. A este paso, el vecino de abajo me va a armar bardo por filtración de conocimiento.

Uh. No me atrevo a apostar -y además no tengo ganas de ponerme a comprobarlo- pero este es el post con menos sentido de todo el blog.

Ayer soñé que era Ella Fitzgerald. No quiero morir con mis piernas amputadas, quiero que les de piel de gallina cuando abro la boca.

Tonight's song: Born Slippy - Underworld. Best served with: empezar a parpadear con la cabeza.